jueves, 3 de abril de 2008

El caso "Marita", 23 años

El 3 de abril de 2002 salió de su casa del centro de Tucumán para hacerse un chequeo. En la esquina apareció un auto rojo y le pegaron un culatazo en la cabeza. Tenía 23 años.
María de los Angeles Verón, Marita Verón, estuvo desaparecida los dos días siguientes. Al tercero, la vieron a unos 30 kilómetros de su casa de Tucumán. Iba tambaleante, como drogada, y alguien le había cambiado las zapatillas por tacos altos.
Un patrullero la levantó y lo que sigue —porque sigue— es confuso, aunque todo va en la misma dirección: Marita Verón cayó en manos de una red de prostitución, una de las varias que quedaron al descubierto tras su secuestro.
El expediente judicial abierto tras la desaparición de Marita es un auténtico manual de trata de mujeres que hoy tiene a diez personas esperando juicio oral. En el camino fueron rescatadas 21 mujeres comunes a las que, como a ella, un día una banda raptó para alquilar por turnos.
Empezaron a aparecer las historias de terror: mujeres compradas a traficantes tras ser secuestradas en las calles, trasladadas de un punto a otro del país y obligadas a "trabajar" hasta "pagar" lo que habían costado.
Fueron varios los testimonios que surgieron, de chicas que habían escapado de ese lugar, pero por cuestiones políticas, la causa está trbada en una red de corrupción. Lo último que supimos de Marita es que: "Tributaba muy bien, porque era completita".

No hay comentarios: